Decorar un interior no siempre es fácil. El espacio, lo que se pretende decir, comunicar… No siempre disponemos de los medios necesarios para poder expresar una sensación o un ambiente con tan solo la decoración funcional. En ocasiones un aspecto más artístico nos puede ayudar a centrar lo que queremos decir, lo que ese ambiente debe inspirar.
La decoración con piezas artísticas se convierte aquí en nuestra alidada. Incluso en los ambientes más modernos y tecnológicos un elemento decorativo-artístico se convierte en algo que transforma totalmente el espacio, con y sin protagonismo, siendo una pieza que expresa algo por sí misma y hace vibrar en consonancia el lugar. Piezas que, emergidas de manos del artista, parecen estar hechas para determinados ambientes y que inspiran y dotan de personalidad lo que hay a su alrededor.
La decoración de interiores con arte en Marbella tienen por supuesto un nombre al que recurrir: David Marshall.
Con obras en multitud de materiales pero que incluso en ambientes corporativos son capaces aportar distintas sensaciones, desde calidez a emoción vibrante dadas las combinaciones: madera, metales fundidos por el propio artista y cristal. Un espacio no vuelve a ser el mismo cuando una pieza de arte forma parte de la decoración de interior, tanto en hogar como en un lugar laboral. Las piezas artísticas se convierten en ese elemento que hace que el lugar se vea distinto y sin él no vibra igual, pierde parte de esa personalidad.
Al crear sus obras David Marshall no piensa en un espacio en concreto sin que dota de una vida e intención propias a las piezas y son las personas las que configuran lo que ese elemento artístico inspira y lo combina con el lugar al que lo destina. Una oficina es una oficina, pero con una pieza de decoración artística como puede ser una obra auténtica de David Marshall, el lugar ya adquiere otro tono, más personalidad, se afianza más y se convierte en un entorno que quiere decir algo, lo que siempre repercute en las sensaciones que se sienten en ese espacio.